jueves, 15 de septiembre de 2011

"OTRA HUMILDE OPINIÓN"

La estructuración  de la oposición tuvo características similares, tanto a nivel nacional como provincial, salvo por el hecho que una se fraccionó para tratar de armarse, mientras que la otra se armó para luego disolverse tácitamente.
Abordando la cuestión que nos interesa en este caso, en nuestra provincia vimos surgir dirigentes que fueron parte de una etapa de ostracismo, los vimos surgir cual ave fénix que revive y se incinera indefinidamente. Asistimos a la aparición de nuevas figuras, amparadas en sus carreras profesionales, donde han ganado un espacio por mérito indiscutible, resguardadas en la relevancia que tomaron en momentos en los que se discutía el futuro de nuestra patria defendiendo intereses sectoriales minoritarios,  sin embargo en la política y sobre todo en nuestra provincia, es necesaria la experiencia militante, la acción constante. No dudo que se ponga muchas veces el corazón en lo que uno hace, no obstante  generar la representatividad y aceptación necesaria para convocar a los ciudadanos a apoyar el ‘otro modelo’ propuesto, exige mucho mas.   Por otra parte, vemos  candidatos que dicen tener experiencia necesaria, aunque a estas alturas creo no suficiente para consolidar un espacio alternativo, que analizan preferible no llegar a acuerdos y defender sus propios intereses sin constituir un punto en común mas allá de la idea del poder por el poder mismo.  Del otro lado, candidatos conocidos, los que más allá de que uno pueda o no estar de acuerdo con los mismos, siguen demostrando posiciones firmes y acción en función de ellas, y sobre todo invitando a la participación, para que desde el compromiso individual se profundice la lucha por los intereses colectivos que se viene dando desde hace ya tiempo.
Es dable pensar en la participación política en libertad, entendida ésta desde su significado más sencillo, como la posibilidad de asistir a elecciones como ciudadanos, desde la posición de electores a la posición de candidatos, no obstante el planteo de una oposición real hubiese sido más inteligente si se hubieran dejado de lado las mezquindades y se hubieran mantenido los pactos. De la manera en la que se siguen intentando armar estos espacios, seguirá siendo difícil contribuir a una opción seria.
Luego de los porcentajes arrojados por las elecciones primarias, aparece como única conclusión posible la aceptación de la sociedad de un modelo popular de inclusión y reivindicación de derechos que habían sido olvidados por una parte de la dirigencia, que hoy pretendía posicionarse como una alternativa posible de cambio. Aquí  surge la cuestión, nadie que no sepa interpretar la necesidad del pueblo puede ser conductor, nadie que proponga un cambio cuando lo que se pretende cambiar es el bienestar común puede considerarse un referente social.
Es por este motivo que asistimos y somos parte de una etapa trascendental en la historia de nuestro país, una etapa en la que la ciudadanía reconoce y legitima un modelo luego de años de descreimiento en la clase dirigente y de la política en general. Por esto también es oportuno analizar el panorama desde una mirada renovadora, prestando más atención a la voluntad de participación ciudadana que se multiplica día tras día, abrir aun más los espacios, pensar en los acuerdos con miras al crecimiento integral de nuestra provincia.
Como ya se dijo, las mezquindades, el orgullo y las ambiciones personales que primaron en el armado de un frente amplio de lo que no ha quedado más que el nombre, indefectiblemente por carecer éste de representatividad, redundará en una victoria del PJ en nuestra provincia, con un caudal de votos mucho mayor al recibido en las mencionadas elecciones primarias, pudiendo rondar el mismo los 80 puntos porcentuales.
Estamos en democracia y bajo este régimen el pueblo ha elegido. “La única verdad es la realidad”.